La tecnología facilita que una empresa externa pueda controlar la IT de una compañía sin necesidad de desplazarse a la misma. Con un sistema de monitorización la compañía que presta este servicio puede gestionar toda la informática con una eficiencia alta y un gran ahorro de costes.
No obstante, en muchas empresas la mejor solución no pasa por contratar un proveedor de servicios gestionados y dejar de tener personal especializado en IT. En estas organizaciones, los profesionales de este departamento le proporcionan muchas ventajas al respecto.
Para que una compañía pueda decidir mejor qué opción escoger, lo mejor es que conozca las principales ventajas e inconvenientes que representa contar con servicios gestionados y los pros y los contras de tener un departamento interno especializado en IT.
Ventajas de los servicios gestionados
Los servicios gestionados proporcionan distintos beneficios a las organizaciones como ahorro de costes, experiencia o flexibilidad:
- Ahorro de costes. Una de las principales ventajas que supone contratar un servicio IT a una compañía externa tiene que ver con el asunto económico. Una empresa se ahorra los costes estructurales que supone tener un gran departamento IT o de iniciar uno en el caso de las compañías más modestas.
- Amplia experiencia. Los proveedores de servicios gestionados tienen un conocimiento amplio y profundo de los distintos servicios IT. Saben aconsejar cuáles son las tecnologías más indicadas para aplicar en la organización y solucionar los principales problemas. Suponen un ahorro importante en formación de los empleados.
- Flexibilidad. Las empresas que se dedican a ofrecer servicios gestionados se adaptan a la demanda y a las dimensiones de la empresa. Pueden controlar toda la IT de la compañía o gestionar solamente una parte pequeña de todos los servicios IT.
Inconvenientes de los servicios gestionados
Según EAE Business School, las desventajas más destacadas de la externalización de servicios son tres:
- Pérdida inmediatez: Por muy rápido y eficiente que sea un servicio gestionado siempre se solucionará más rápido un problema con personal interno que con un proveedor externo. No obstante, muchos servicios gestionados incluyen la implementación de tecnologías que facilitan la gestión de la IT y aumentan la rapidez de la resolución de incidencias.
- Gastos imprevistos: Cuando una empresa cuenta con personal interno experto en IT tiene unos gastos estructurales. Una cantidad de dinero considerable, pero previsible. En cambio, cuando externaliza servicios se producen más gastos imprevistos. No obstante, cada vez son más frecuentes las tarifas planas en los servicios gestionados que mitigan este efecto.
- Menor grado de implicación: Por muy profesional que sean los trabajadores de una empresa de servicios gestionados nunca tendrán el mismo grado de implicación que los empleados propios de la compañía. No obstante, muchas tienen un grado de implicación muy alto.
Ventajas de tener un departamento interno de IT
Contar con un departamento interno supone distintas ventajas. Principalmente, las tres siguientes:
- Disponibilidad: A pesar de que los servicios de outsourcing han evolucionado mucho en los últimos años lo cierto es que tener un trabajador en una empresa es muy cómodo, ya que siempre está ahí para lo que se le solicite.
- Máximo nivel de compromiso: A priori en una empresa un trabajador está a gusto y tiene un alto nivel de compromiso. Encaja mejor que nadie cuando un proyecto requiere un sprint para lograrlo sacar adelante y es capaz de sacrificar horas de sueño para lograr el objetivo. Esto en los servicios gestionados puede ocurrir, pero en menor medida.
- Mejor conocimiento del negocio: Un trabajador del departamento IT conoce el día a día de la empresa y sabe qué es lo que le conviene más en cada momento y circunstancia. Es el que mejor sabe cómo funciona la empresa y quién conoce los puntos fuertes y los débiles que tiene.
Desventajas de tener un departamento interno de IT
Los inconvenientes principales de contar con un departamento son los siguientes:
- Gastos de formación. Para que un trabajador produzca más que un servicio gestionado hay que formarlo en las últimas tecnologías. Y esto es un proceso muy caro.
- Mayores costes estructurales. Un trabajador implica una nómina, una cuota a la seguridad social y un puesto de trabajado. En cambio, en los servicios gestionados, una empresa se ahorra todos estos costes.
- Conflictos internos. Un trabajador no comprometido puede ser un problema y un obstáculo para encontrar soluciones. Con los servicios gestionados se evitan los daños colaterales derivados de la falta de motivación y el compromiso en el proyecto colectivo de los empleados.
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